Terminada la Guerra Civil en el mes de abril, 1939 supone el relanzamiento del fervor de la población por las pruebas ciclistas. El Club recibe numerosas peticiones para organizar carreras durante las fiestas veraniegas en barrios y pueblos de la comunidad, como el caso de los barrios de las Delicias y Utrillas de la capital aragonesa. Viendo el auge que las competiciones están tomando, y pese a las dificultades que entrañaba, se decide de común acuerdo con el diario Amanecer poner en marcha una prueba ciclista de mayor envergadura. De ese modo ve la luz la primera edición de la Vuelta a Aragón, que se disputó entre los días 5 y 12 de octubre de 1939 sobre 1.111 kilómetros de recorrido divididos en siete etapas, con una jornada de descanso en Huesca tras el cuarto día de competición. Venció Antonio Andrés Sancho, el mejor de los 47 corredores (seis aragoneses: Cabestrero, Abad, Lahoz, Cabrera, Salazar y Abadía) que participaron en esta primera edición.
Primo de Rivera (25-12-1945)
En 1940, el presidente fundador del Club, Francisco Martínez deja su cargo a Manuel Baraza, que lleva a cabo la reforma de los Estatutos de la entidad (redactados exclusivamente sobre el excursionismo) para posibiltar la organización de carreras tras unos años de parón. Se comienzan a organizar numerosas pruebas por toda la geografía aragonesa en una época en la que también otros clubes de la ciudad (C.C. Zaragozano y C.C. Ebro) inician su actividad competitiva. En 1943, Tomás Gros accede a la presidencia del club, al que impulsa de manera notable multiplicando el número de pruebas organizadas. Entre ellas, sigue destacando el Circuito Ribera del Jalón, que el club organiza con tremendo éxito (entre 1947 y 1951, sobre tres etapas) hasta el año 1954, pero también la creación de otras como el Gran Premio Ciudad de Zaragoza, el Gran Premio de Navidad, que se celebraba en el zaragozano Parque Primo de Rivera en la mañana del 25 de diciembre o las carreras de Binéfar y Tamarite, con setenta ediciones a sus espaldas. Además, el Iberia se encarga de organizar una importante cita, el Campeonato de España de Veteranos (1944).
En 1949 se celebran las Bodas de Plata del Club, al que accede como presidente Enrique Trasobares, a quien sucederá dos años después Jaime Barat. Tras la desaparición del Circuito Ribera del Jalón, la gran prueba organizada por el Club es el Circuito Enlace de Carreteras, que reunía a una enorme cantidad de público en el barrio de las Delicias de Zaragoza, donde se llegaban a reunir 25.000 personas en las tribunas cedidas por el Ayuntamiento y el Ejército. La llegada a la presidencia del Club de Ángel Alda (1958) cierra un periodo de menor actividad por algunas divergencias con la Federación Aragonesa y abre una época de bonanza para el Iberia, que cuenta con varios equipos de categoría amateur.
